Que corra la voz, ¡despertó el gigante!
por Benicio Martínez
(ARTICULO DEL DIARIO ABC COLOR DE LA FECHA)
Es cierto, aún adolece de falencias en la movimentación. Principalmente en la tan necesaria complementación entre los centrales Cáceres y Nájera. El matrimonio deportivo aún se está pergeñando al igual que todo el equipo. Todavía existe, como es lógico por otra parte, una cuota importante de ansiedad. La desprolijidad de Molinas crea algunos inconvenientes cuando el equipo pierde el balón en el medio justo cuando está a punto de desdoblarse de defensa a ataque. También se podrá aducir que Independiente no constituye un parámetro válido dado lo bisoño del rival. Todo es absolutamente admisible.
Sin embargo, lo que ya no se puede poner en tela de juicio es que este equipo de Olimpia, con una legión extranjera formidable, ayer de los titulares seis eran foráneos, recuperó la antaña autoridad futbolística y de respeto de parte del rival. Ante Nacional ganó más por temperamento y personalidad que por ideas. Ayer ante Independiente, sencillamente plasmó en la cancha ambas cualidades. Más allá de las disquisiciones que se podrán hacer analizando virtudes y defectos del equipo, emerge una realidad de manera indubitable: despertó Olimpia de un largo sueño lleno de ilusiones y esperanzas que estaba lejos de hacerse realidad. El hincha lo percibe a flor de piel. Sabe que el equipo puede dar mucho más. Sabe que hay riqueza individual y que Pumpido puede hamalgamar un equipo con amplio concepto de juego colectivo. A todos estos aspectos hay que adosarle que por distintas razones no pueden aún integrar el equipo jugadores de la talla de Vladimir Marín y Sergio Orteman. Ambos, por experiencia y capacidad, son capaces de potenciar sustancialmente el caudal futbolístico del equipo y darle una mejor fisonomía.
Por lo demás, existe un valor agregado. Tratándose de Olimpia, el aspecto emocional por el sentimiento que genera y despierta tiene un peso extra. Por ejemplo, para Libertad no es lo mismo que le discuta el liderazgo el elenco franjeado que otro de menor peso histórico. La verdad, hoy a este Olimpia hay que aguantarlo. Por de pronto, se anota como firme candidato entre los parientes ricos del torneo. Además juega con ventaja: se siente en la cancha al jugador número doce.
7 de Febrero de 2011 00:00
por Benicio Martínez
(ARTICULO DEL DIARIO ABC COLOR DE LA FECHA)
Es cierto, aún adolece de falencias en la movimentación. Principalmente en la tan necesaria complementación entre los centrales Cáceres y Nájera. El matrimonio deportivo aún se está pergeñando al igual que todo el equipo. Todavía existe, como es lógico por otra parte, una cuota importante de ansiedad. La desprolijidad de Molinas crea algunos inconvenientes cuando el equipo pierde el balón en el medio justo cuando está a punto de desdoblarse de defensa a ataque. También se podrá aducir que Independiente no constituye un parámetro válido dado lo bisoño del rival. Todo es absolutamente admisible.
Sin embargo, lo que ya no se puede poner en tela de juicio es que este equipo de Olimpia, con una legión extranjera formidable, ayer de los titulares seis eran foráneos, recuperó la antaña autoridad futbolística y de respeto de parte del rival. Ante Nacional ganó más por temperamento y personalidad que por ideas. Ayer ante Independiente, sencillamente plasmó en la cancha ambas cualidades. Más allá de las disquisiciones que se podrán hacer analizando virtudes y defectos del equipo, emerge una realidad de manera indubitable: despertó Olimpia de un largo sueño lleno de ilusiones y esperanzas que estaba lejos de hacerse realidad. El hincha lo percibe a flor de piel. Sabe que el equipo puede dar mucho más. Sabe que hay riqueza individual y que Pumpido puede hamalgamar un equipo con amplio concepto de juego colectivo. A todos estos aspectos hay que adosarle que por distintas razones no pueden aún integrar el equipo jugadores de la talla de Vladimir Marín y Sergio Orteman. Ambos, por experiencia y capacidad, son capaces de potenciar sustancialmente el caudal futbolístico del equipo y darle una mejor fisonomía.
Por lo demás, existe un valor agregado. Tratándose de Olimpia, el aspecto emocional por el sentimiento que genera y despierta tiene un peso extra. Por ejemplo, para Libertad no es lo mismo que le discuta el liderazgo el elenco franjeado que otro de menor peso histórico. La verdad, hoy a este Olimpia hay que aguantarlo. Por de pronto, se anota como firme candidato entre los parientes ricos del torneo. Además juega con ventaja: se siente en la cancha al jugador número doce.
7 de Febrero de 2011 00:00
Sáb Jul 28, 2012 12:13 am por bonito
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Dom Jun 17, 2012 2:25 am por barretoo
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Mar Mar 20, 2012 12:11 am por Admin
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Lun Dic 26, 2011 1:07 am por aguila
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Lun Sep 12, 2011 2:34 am por jeanxpaulsen
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Dom Ago 28, 2011 3:41 am por Admin
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Vie Ago 26, 2011 5:47 am por Admin
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Mar Jul 26, 2011 1:20 pm por kavier
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